Acompañar en el aborto: apoyo, empatía y respeto
El proceso de aborto, ya sea por decisión personal o por circunstancias médicas, puede ser una experiencia profundamente emocional y física para quienes lo atraviesan.
Acompañar a una persona durante este proceso es un acto de amor, empatía y respeto, y puede marcar una gran diferencia en su bienestar.
Sin embargo, muchas veces, no sabemos cómo ofrecer el apoyo adecuado o tememos hacer o decir lo incorrecto.
Hablemos sobre cómo acompañar de manera respetuosa y consciente a alguien que está pasando por un aborto.
Escuchar sin juzgar
Una de las mejores formas de brindar apoyo es ser una persona dispuesta a escuchar sin emitir juicios.
Las razones detrás de un aborto son profundamente personales, y la persona que lo está viviendo puede sentir inseguridad, culpa, tristeza o alivio.
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Deja que sea ella quien exprese lo que siente, sin interrumpir ni intentar imponer tus propias creencias.
Respetar la privacidad y las decisiones
El aborto es una experiencia íntima, y muchas personas prefieren mantenerlo en privado.
Si decides acompañar, es esencial que respetes la privacidad de la persona y no compartas su historia con otras personas a menos que ella lo autorice.
Asegúrate de respetar todas sus decisiones, ya sea sobre el procedimiento, el tratamiento médico o la forma en que quiere lidiar con la situación emocionalmente.
Brindar apoyo práctico
Acompañar durante un aborto implica estar emocionalmente disponible, pero también es útil ofrecer apoyo práctico.
Esto puede incluir:
- Ayudar con el transporte a las citas médicas.
- Asistir con las compras o quehaceres domésticos.
- Recordar tomar la medicación si es un aborto farmacológico.
- Estar presente durante el procedimiento, si así lo desea.
A veces, pequeños gestos como estos alivian la carga física y logística que la persona puede sentir.
Informarse sobre el proceso
Cada tipo de aborto (quirúrgico o medicado) tiene sus particularidades.
Si te informas previamente sobre lo que puede esperar, podrás ofrecer un mejor apoyo.
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Por ejemplo, en el caso de un aborto con medicamentos, puede haber dolor abdominal intenso o sangrado, lo que puede ser normal.
Si comprendes el proceso, puedes ayudarla a distinguir entre lo que es común y cuándo debe buscar atención médica.
Crear un ambiente de calma y confort
El entorno físico y emocional puede influir mucho en la recuperación de la persona.
Si está en casa, trata de crear un espacio cómodo y acogedor: mantas suaves, luz tenue, y tranquilidad.
También, asegúrate de que la persona tenga acceso a alimentos ligeros y bebidas para hidratarse, especialmente si está recuperándose de un aborto medicado o quirúrgico.
Validar los sentimientos, cualquiera que sean
Los sentimientos tras un aborto pueden variar enormemente, desde alivio hasta tristeza, confusión, o incluso una mezcla de todos.
Es importante no invalidar ninguno de estos sentimientos.
Si la persona se siente aliviada, está bien; si se siente triste, también está bien.
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Lo importante es que sepa que tiene el derecho a sentir lo que siente, y que no está sola.
Ofrecer recursos adicionales
A veces, además del apoyo emocional de un ser querido, es necesario buscar ayuda profesional.
Puedes investigar y tener a mano recursos de consejería o apoyo psicológico especializados en el acompañamiento después del aborto.
Hay organizaciones y líneas de ayuda que brindan información confiable sobre la salud reproductiva.
Evitar las presiones sobre el “deberías sentir”
Es importante recordar que cada persona vive el aborto de manera distinta.
Evita comentarios como “deberías sentirte bien ahora” o “pronto te sentirás mejor”, ya que pueden invalidar el proceso emocional que la persona está viviendo.
En lugar de eso, pregúntale cómo se siente y qué necesita en ese momento.
Mantener el apoyo después del aborto
El proceso de acompañamiento no termina una vez que el aborto ha finalizado.
A veces, el impacto emocional surge días o semanas después.
Estar presente en el tiempo posterior puede ser igualmente importante, ya sea para hablar, acompañarla a una consulta médica de seguimiento o simplemente para estar disponible en caso de que lo necesite.
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Acompañar durante un aborto es una experiencia que requiere mucha empatía, respeto y disposición para estar presente, tanto física como emocionalmente.
Cada persona tiene una vivencia única, y el acompañante debe estar preparado para respetar esa individualidad.
El acto de acompañar es, en última instancia, un acto de amor y apoyo incondicional, que permite que la persona que atraviesa el proceso no se sienta sola.
Recuerda que tu apoyo puede marcar una gran diferencia en cómo esa persona enfrenta y recuerda esta experiencia.
Por Keila Itzel Rodríguez Peña
