Tips para que niñas y niños descubran el amor por los libros
Los libros siguen siendo ventanas abiertas a la imaginación; pero, ¿Cómo lograr que las nuevas generaciones se acerquen a la lectura de forma natural y divertida? Aquí te damos algunas claves.
Que vean leer en casa:
El ejemplo arrastra. Si las niñas y niños ven a personas adultas disfrutar de un libro, es más probable que se interesen por imitar ese hábito.
Leer en voz alta o compartir fragmentos divertidos es una forma poderosa de generar curiosidad.
Libros a su altura (literal y simbólicamente):
Tener libros accesibles en casa, tanto física como emocionalmente, es fundamental.
Elige títulos adecuados para su edad, con temáticas que conecten con sus intereses: animales, aventuras, misterios, ciencia, humor.
CONTINÚA LEYENDO: Día Mundial del Libro ¿y esta rosa?
No obligar, sino invitar:
Convertir la lectura en una tarea o castigo puede alejarles de los libros.
Mejor ofrecerla como una opción divertida, un momento de conexión o incluso un refugio personal.
Leer también es jugar:
Cómics, cuentos interactivos, libros pop-up, audiocuentos o apps de lectura con narraciones teatrales pueden ser aliados.
Lo importante no es el formato, sino la experiencia.
Visitas a bibliotecas y ferias del libro:
Un paseo entre estantes llenos de colores y personajes puede convertirse en una aventura memorable.
Permitirles elegir sus propios libros fortalece su autonomía lectora.
Crear rutinas con libros:
Leer antes de dormir, al llegar de la escuela o al iniciar el fin de semana puede convertirse en un ritual esperado y disfrutado.
Dejar que abandonen libros:
Si un título no les gustó, no pasa nada.
Lo importante es seguir buscando hasta encontrar “ese libro” que encienda la chispa.
TE PUEDE INTERESAR: Li Chamb: documental sobre la lucha de las mujeres indígenas
Según datos del INEGI, 59.5% de la población no lectora declaró que en la escuela durante la infancia no fue motivada a asistir a las bibliotecas; entre más temprano se cultive la lectura, mayor será la posibilidad de que se mantenga durante toda la vida.
Se trata de formar niñas y niños con pensamiento crítico, creatividad y sensibilidad. Y para eso, un buen libro siempre será un gran comienzo.